martes, 21 de septiembre de 2010

Grito.

Me gustaría creer ciertos asuntos, romper barreras, distancias y que todo girase 180º. La realidad es que el tren ha parado. No era el momento y el daño ha sido palpable. Si ayer tenía todo claro, hoy todo se ha vuelto complicado. Creo que una buena manera de describir la situación, sería el famoso cuadro de Munch "El Grito".


La desesperación, el miedo, la angustia, se hacen palpables. Dominan la situación. Se hacen protagonistas en un estridente ambiente. El vértigo ha ganado el pulso a la calma, que tímida se esconde al fondo del cuadro. Se queda en un segundo plano, formando parte del todo, en la mínima expresión. 
No sé, si la dirección es seguir por el camino del puente hacia adelante o retroceder. Si elegir la derecha o la izquierda. 

¿Cuál es el camino a seguir? 
¿Y la forma de seguirlo? 

No sé la respuesta, ni si quiera se como llegar hasta esa calma que necesito. Sólo sé que tengo que hacerlo. He de mantener la mente fría. Alejarme de esas estridentes líneas curvas, llenas de colores que solo me llevan a la desesperación. No puedo permitir que el vértigo me siga absorviendo. #  

2 comentarios:

  1. cariño te sale historia del arte x las orejas...jajajaja pero es una buena comparación...y un gran cuadro! aunque me quedo con Goya. (L)

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  2. ni que lo digas!!
    gracias por estar siempre siempre ahí!
    te quiero! ♥

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