domingo, 6 de noviembre de 2011

Ni sí, ni no.

No puedo decir que exista un punto medio porqué no, tampoco puedo decir que si, ni que no, ni que haya algo, pero tampoco es que no haya nada... No me preocupa, porqué sé que me gustan sus gestos, los pequeños detalles pero que a la vez para él son grandes pasos. Me gusta que me llame cuando menos me lo espero o que a estas alturas venga a explicarme las diferentes clases de besos. Que aparezca en el momento justo o que por ejemplo se esfuerce en preparar una alta dosis de dulce cuando ve que mi estabilidad se tambalea. Y no quiero perderme nada de todo esto. Puede que la casa en su día la empezásemos por el tejado, y así nos fué, pero cuando no estás preparado para algo y llega así, te dejas llevar y llegas a perder el norte. Por eso ahora creo que todas las oportunidades de que lo que sea, lo que llegue o no a ser, salga bien, nos las merecemos.  












Basta de desestabilizarme por motivos sin sentido, de crear una lista de prioridades totalmente equivocada, de callarme, de evitar, basta de todo eso.

3 comentarios:

  1. P R E C I O S A! (L)

    Me ha encantado, que bonito escribes :)

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  2. Que preciosa entrada me ha gustado mucho.

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  3. Y a disfrutar. Lo vivido es lo que merece la pena y lo que aun estar por vivir, aun más! Yo estaré aquí para siempre que me necesites, lo sabes. Al menos no soy tortitas con nocilla. Era eso?? xD te Quiero

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