miércoles, 14 de diciembre de 2011

El tiempo se agota.

Perdemos demasiado tiempo en asuntos sin sentido, dejando lo verdaderamente importante de lado. No prestamos atención a lo que quizás mañana echemos en falta, y es que, aunque no queramos, todo cambia en un instante, y es en ese momento cuando nos paramos a pensar en todas las cosas que queríamos hacer y no hemos hecho, en todas esas personas a las que queríamos decirle "te quiero" pero no lo hicimos. Es en ese instante cuando aprendemos que no hay que aplazar nada en la vida, tenemos que aprovechar cada minuto que nos regala. Vivimos sin enfrentarnos a la posibilidad de que quizás dentro de un segundo todo cambie, o quizás, todo acabe. Dejamos que nuestro ego, nuestra cabezonería y nuestro orgullo, consuman esos minutos a sus anchas, en exceso, sin preocuparnos de las consecuencias, y sin darnos cuenta perdemos el tiempo con las personas más importantes, en lugar de sacarle el máximo partido.

Puede que el próximo minuto sea el último... ¿estás siendo la mejor persona que podías ser?






     Texto basado en la historia de Rick Elías que dió una charla de tres minutos con la que consiguió cambiar la vida de la gente que le escuchó.
(Todo el contenido del vídeo es propiedad de Antena3. www.antena3.com )

1 comentario:

  1. No sé si vi la charla, pero si que recuerdo haberlo escuchado en algún lugar. Lo malo de esto, es que al principio nos damos cuenta, pero en las situaciones de la vida.. seguiremos discutiendo. Pocas personas, si no le pasan o que al chico este.. no se darán cuenta de nada. Un besito y bonita entrada ;)

    ResponderEliminar