viernes, 31 de octubre de 2014

De la chispa al fuego. II.

Cuando la vida te plantea determinadas situaciones, nadie te dice como enfrentarte a ellas, o cual es la forma adecuada de reaccionar para hacerte a ti misma el mínimo daño posible. Y si además, esas situaciones, repiten un mismo esquema de consecuencias, llegas a perderte del todo. 
Es muy complicado remontar el vuelo una y otra vez, saber por donde tirar, y sin un mínimo espacio de alivio, o de gesto al que aferrarte para continuar, cuando realmente, lo único que te apetece es mandar a la mierda tantas y tantas cosas...
Poder llegar a expresar lo que sientes y como te sientes ante determinadas situaciones, en las que crees que nadie va a ser capaz de entenderte, es una de grietas que se te presentan en el camino y creo, que una de las más complicadas de atravesar o de las más costosas de resolver.
Por eso cuando te encierras en la maraña de tus pensamientos, tus sensaciones, tus indecisiones... y no encuentras cuál de todas es la salida del laberinto, el agobio llega a tal extremo que el hecho de tirar la toalla llega a ser una realidad y de repente, sin pensarlo, ni esperarlo, alguien te muestra la fórmula y el resultado de todo ese lío que tienes en tu cabeza y te enciende esa bombillita que abre las compuertas al máximo para que empezar a desahogarte sea tan sencillo como parpadear.
Y es que, estoy cansada de las personas que aparentan sentir y cuando llega la hora de la verdad, desaparecen. ¿Por qué continuamos alegando que el físico es algo irrelevante si realmente en muchas ocasiones es lo único que nos mueve? No digo que sea así con todo el mundo, pero debe de ser que tengo un imán con esas personas a las que les atrae la forma de ser de alguien por encima de cualquier otra cosa, pero después, desaparecen ante la más mínima "dificultad", por llamarlo de alguna forma.
Si no sientes nada, si lo que necesitas es un físico, juega con esa carta desde el principio, no continúes indagando en los corazones de la gente si después vas a dejarlos llenos de grietas. Si tu juegas con esa carta desde el primer momento dilo, que ya jugaré con las mías como crea conveniente, lo que no voy a hacer es ponerme más etiquetas de las necesarias, ya bastantes me impone la sociedad...
Me sigo considerando incapaz de expresar de forma correcta todo lo que este tema me provoca, por eso, al escuchar y ver el otro día un nuevo tema de uno de los artistas españoles que más escucho, sentí una sensación de alivio tan grande... La primera reacción fué un poco de shock, no me esperaba ese tema así para nada, pero al segundo comprendí a la perfección que todo lo que yo quería expresar y no sabía como, él lo había plasmado en casi 4 minutos en una canción con una letra más bonita imposible y un video tan expresivo que resumía todas esas grietas que la vida me había planteado...
Por eso una vez más, debo darle las gracias a la música por darle sentido a mi vida y a los momentos que el camino me pone por delante.

Rayden - Matemática de la carne


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